Por qué no está Álex Cabrera en Play este año ? es una pregunta compleja. Se le puede achacar la culpa a la suspensión que recibió. También se puede decir que ningún equipo estaría dispuesto a contratarlo, ya que todos en este momento tienen sus estructuras completas. Pero que hizo que este hombre, el refuerzo mas apetecido, el cambio que puso a muchos a pensar si no era excesivo ceder a 3 o mas jugadores por él, pasara a un segundo plano ?
Álex ha visto su nombre involucrado en varios reportes ligados a sustancias prohibidas en su carrera. El hombre que estuvo a punto de romper el récord de Sadaharu Oh en Japón, que tras muchos años deseándolo rompió el récor de Baudilio, siempre ha estado bajo el ojo del huracán por sus kilométricos batazos y su fuerza descomunal. Hasta aquí, no hay mayor diferencia con otros grandes sluggers que han pasado por la historia. El verdadero problema vino cuando intentó demostrar que el no pertenecía a ese grupo de bateadores que han tomado decisiones equivocadas.
Primero señaló que su positivo se debía a un medicamento, sin embargo una serie de dimes y diretes extendieron el hecho mas allá de lo que debió ser. La pequeña abertura entre "se lo di a la gerencia y ellos no lo mostraron" hasta el "si jugó asi, aunque se conozca la razón es trampa" se transformó en un debate donde, detractores y defensores, exponían con vehemencia sus alegatos, complicando mas y volviendo pública una decisión que se debía manejar internamente.
Poveda, García, Torrealba, Giménez y Villarreal, fueron casos que se manejaron con guantes de seda, hubo inconformidades, hubo defensas, pero no se generó un debate tan amplio y con tantos "lo sabía" como con Cabrera. Todos los mencionados, bajo la justificación que les daba, o no, el hecho de ingerir un medicamento, cumplieron o cumplen sus suspensiones, en el caso de torrealba optó por el retiro, ya que las reglas son claras, y si se actuó sin mala fe, volver con la frente en alto y hacer su trabajo es suficiente. En el caso de Álex, una falla se convirtió en un momento donde importaba además el hecho de, mas que demostrar su "limpieza" de sustancias, demostrar que sus logros en el deporte fueron a base de trabajo.
El "retiro" por el cual está pasando Álex Cabrera, comenzó justamente cuando decidió demostrar que podía seguir jugando. Intentar demostrar que su imagen como poderoso bateador está limpia, y que por cualquier razón extradeportiva dio positivo, es lo que lo llevó a ser el centro de la polémica. El aficionado no olvida, puede ser cruel. El periodista a veces cruza el límite entre informar e intencionar la información. La suma de todos los factores desembocó en que Álex Cabrera se volviera parte del grupo que lo apuntó, y el hecho de tratar de demostrar su inocencia ante todo, además de sentirse señalado y "vetado" de la liga, jugó un papel importante.
Si Cabrera hubiese emitido un comunicado dando su versión, aceptando que las reglas señalan que una falla de tal naturaleza acarrea una suspensión, y que ciertas irregularidades se presentaron en el proceso, quizás en septiembre, uniformado y practicando, hubiese demostrado con hechos que sus logros no requirieron de ayuda. Sin embargo, los factores presión, orgullo, y muchas otras cosas que pasan por su cabeza, lo llevaron a actuar en reacción y no en respuesta a sus detractores, a salir por la puerta de atrás para evitar mas daño.
Un grande de la liga, de esos que brindaron ratos de emoción a granel, actualmente está ligado al deporte de forma negativa, y con pocas oportunidades de limpiar su imagen. Vuelvo sobre mis pasos, se comprobó una falla al reglamento, se aplicó la sanción. El fanático opinó, el periodista informó. Pero el protagonista recurrió a todo lo que pudo, acertadamente o desafortunadamente, para que las 3 partes concidieran en que aún puede jugar. No es por el dinero, no es por la fama. La forma más simple de esquivar los obstacúlos en el camino hacia la puerta grande y la despedida, era caminar lentamente hacia ella, y en el camino dar las explicaciones correspondientes, si tenían sustento y base mejor, no obstante pasó todo lo contrario, y correr hacia la puerta antes de que esta se cerrará, aún con los obstáculos visibles en el camino, probó no ser la mejor forma de llegar.
Álex ha visto su nombre involucrado en varios reportes ligados a sustancias prohibidas en su carrera. El hombre que estuvo a punto de romper el récord de Sadaharu Oh en Japón, que tras muchos años deseándolo rompió el récor de Baudilio, siempre ha estado bajo el ojo del huracán por sus kilométricos batazos y su fuerza descomunal. Hasta aquí, no hay mayor diferencia con otros grandes sluggers que han pasado por la historia. El verdadero problema vino cuando intentó demostrar que el no pertenecía a ese grupo de bateadores que han tomado decisiones equivocadas.
Primero señaló que su positivo se debía a un medicamento, sin embargo una serie de dimes y diretes extendieron el hecho mas allá de lo que debió ser. La pequeña abertura entre "se lo di a la gerencia y ellos no lo mostraron" hasta el "si jugó asi, aunque se conozca la razón es trampa" se transformó en un debate donde, detractores y defensores, exponían con vehemencia sus alegatos, complicando mas y volviendo pública una decisión que se debía manejar internamente.
Poveda, García, Torrealba, Giménez y Villarreal, fueron casos que se manejaron con guantes de seda, hubo inconformidades, hubo defensas, pero no se generó un debate tan amplio y con tantos "lo sabía" como con Cabrera. Todos los mencionados, bajo la justificación que les daba, o no, el hecho de ingerir un medicamento, cumplieron o cumplen sus suspensiones, en el caso de torrealba optó por el retiro, ya que las reglas son claras, y si se actuó sin mala fe, volver con la frente en alto y hacer su trabajo es suficiente. En el caso de Álex, una falla se convirtió en un momento donde importaba además el hecho de, mas que demostrar su "limpieza" de sustancias, demostrar que sus logros en el deporte fueron a base de trabajo.
El "retiro" por el cual está pasando Álex Cabrera, comenzó justamente cuando decidió demostrar que podía seguir jugando. Intentar demostrar que su imagen como poderoso bateador está limpia, y que por cualquier razón extradeportiva dio positivo, es lo que lo llevó a ser el centro de la polémica. El aficionado no olvida, puede ser cruel. El periodista a veces cruza el límite entre informar e intencionar la información. La suma de todos los factores desembocó en que Álex Cabrera se volviera parte del grupo que lo apuntó, y el hecho de tratar de demostrar su inocencia ante todo, además de sentirse señalado y "vetado" de la liga, jugó un papel importante.
Si Cabrera hubiese emitido un comunicado dando su versión, aceptando que las reglas señalan que una falla de tal naturaleza acarrea una suspensión, y que ciertas irregularidades se presentaron en el proceso, quizás en septiembre, uniformado y practicando, hubiese demostrado con hechos que sus logros no requirieron de ayuda. Sin embargo, los factores presión, orgullo, y muchas otras cosas que pasan por su cabeza, lo llevaron a actuar en reacción y no en respuesta a sus detractores, a salir por la puerta de atrás para evitar mas daño.
Un grande de la liga, de esos que brindaron ratos de emoción a granel, actualmente está ligado al deporte de forma negativa, y con pocas oportunidades de limpiar su imagen. Vuelvo sobre mis pasos, se comprobó una falla al reglamento, se aplicó la sanción. El fanático opinó, el periodista informó. Pero el protagonista recurrió a todo lo que pudo, acertadamente o desafortunadamente, para que las 3 partes concidieran en que aún puede jugar. No es por el dinero, no es por la fama. La forma más simple de esquivar los obstacúlos en el camino hacia la puerta grande y la despedida, era caminar lentamente hacia ella, y en el camino dar las explicaciones correspondientes, si tenían sustento y base mejor, no obstante pasó todo lo contrario, y correr hacia la puerta antes de que esta se cerrará, aún con los obstáculos visibles en el camino, probó no ser la mejor forma de llegar.